
A la búsqueda de puffins (frailecillos) por Escocia
Si alguna vez has soñado con ver a los frailecillos en su hábitat natural, Escocia es el lugar perfecto para cumplir ese deseo. Estas pequeñas aves, con su aspecto rechoncho y su peculiar pico de colores, son un verdadero espectáculo para los amantes de la naturaleza. Desde las islas Shetland hasta la deslumbrante St. Kilda, hay un sinfín de destinos donde puedes avistar a estos adorables pájaros. Pero más allá de su aspecto encantador, los frailecillos tienen una personalidad curiosa que se deja ver en sus interacciones con los visitantes.
Date un paseo en barco por el escénico North Berwick o aventúrate hasta la mágica Isla de May para disfrutar de una experiencia única. Nos lo dijo el capitán Davey Kirkpatrick: “A los frailecillos les gusta la gente”, y parece que eso es cierto. Cada temporada, entre abril y agosto, estos pintorescos pájaros regresan a las costas escocesas, así que ¡asegúrate de planificar tu visita en el momento adecuado para no perderte este espectáculo natural!
Descubriendo a los frailecillos en Escocia
«Recordad, a los frailecillos les gusta la gente», era la frase que repetía con un acento escocés inconfundible Davey Kirkpatrick, capitán del Iolaire of Iona, un antiguo barco pesquero transformado en crucero turístico. En nuestro viaje hacia la sorprendente Isla de Staffa, éramos unos treinta viajeros: ancianos disfrutando del sol en la parte trasera, parejas absortas en la línea del horizonte, unos pocos entusiastas con cámaras que capturaban cada criatura a nuestro paso, y un bebé maravillado por todo lo que le rodeaba.
«A los frailecillos les gusta la gente»
Después de menos de una hora navegando en un mar sorprendentemente tranquilo para esta zona, llegamos a la isla, un impresionante promontorio volcánico donde anidan centenas de frailecillos (Fratercula arctica), conocidos localmente como puffins. Este lugar es solo uno de los muchos en Escocia donde, entre marzo y agosto, más de un millón de estos coloridos pájaros llegan para criar a sus pequeños, los adorables pufflings.
Estos pequeños seres, que parecen una curiosa mezcla entre pingüinos y loros, miden apenas 30 cm y caminan con torpeza. Sin embargo, cuando se lanzan desde los acantilados al vacío, se convierten en verdaderos maestros del aire, volando con destreza en busca de peces, su alimento principal.
«Pueden sumergirse a profundidades notables y alcanzar velocidad de hasta 90 km/h»
Dichos frailecillos son capaces de sumergirse a decenas de metros de profundidad, mantener su aliento bajo el agua por medio minuto y volar a velocidades sorprendentes, todo esto siendo más pequeños que una paloma. Su pico, que se vuelve una explosión de colores durante la época de apareamiento, no solo les sirve para pescar y apilar hasta 20 peces a la vez, sino también para construir madrigueras en los acantilados.
Si un depredador se atreve a acercarse demasiado, los frailecillos no dudan en protegerse, utilizando su pico con una actitud sorprendentemente agresiva.
En un incidente curioso, cerca de Durness, en el extremo noroeste de las Highlands, tropecé con ellos por pura casualidad. El día era desastroso: un torrencial aguacero y un viento casi insoportable. En un instante de calma, mientras pagábamos el camping, vi un mapa en el tablón de anuncios que marcaba un “área de puffin” en un acantilado cercano. Pregunté a la recepcionista si realmente había frailecillos allí, y con ese humor escocés que es difícil de descifrar me aseguró: «Si no los ha llevado el viento, ¡ahí estarán!».
«Si no los ha llevado el viento, ¡ahí estarán!»
Sin pensarlo, subimos a la campervan y, siguiendo sus indicaciones, nos dirigimos hacia la bahía de Balnakeil. Aunque el mapa mostraba que estábamos a menos de un kilómetro, la realidad era diferente: una travesía que implicó enfrentar cercas y muros, y un sendero que nos condujo a nuestro destino.
Tras tres kilómetros de caminata, llegamos a un acantilado donde los frailecillos flotaban despreocupadamente, dedicándose exclusivamente a la pesca, sin percatarse de que estaban bajo la atenta mirada de una cámara de la Scottish Wildlife Trust y que enfrente había una base militar. Era la primera vez que veía frailecillos en su hábitat natural, y la emoción de este encuentro me acompañaría a otros dos lugares: las islas de Staffa y Handa.
Escocia ofrece varios lugares idóneos para observar estos encantadores pájaros: desde el archipiélago de Shetland y la isla patrimonio mundial de St. Kilda, hasta el refugio marino de Firth of Forth, cerca de Edimburgo.
«Ver a los frailecillos es como estar en un documental natural»
La pequeña isla de Handa, al norte de las Highlands, es también un refugio aviar destacado. No solo alberga la mayor colonia de araos o alcas (Uria aalgae) en el Reino Unido, sino que también podemos ver frailecillos en un lugar que habla por sí mismo: puffin bay. Allí, como en cualquier otro sitio donde anidan, simplemente tenemos que sentarnos cerca del borde del acantilado y esperar unos minutos para disfrutar del espectáculo.
Como si de un documental natural se tratara, observamos a los frailecillos lanzándose al agua en grupos, maniobrando entre las rocas sin chocar con otros pájaros, o simplemente disfrutando del paisaje, moviendo su cabecita de lado a lado. Son los auténticos payasos del mar, siempre curiosos, acercándose a ver quiénes somos. Y así volvemos a recordar las sabias palabras de Davey: a los frailecillos les encanta la compañía humana.
La Maravilla de los Frailecillos
Hoy he tenido la gran oportunidad de observar a los frailecillos, unos pequeños pájaros que destacan por sus colores vibrantes y su carácter amigable. Es esencial que nos esforcemos en proteger su hábitat natural para salvaguardar esta hermosa especie.
- Sus colores encantan a la vista.
- Son simpáticos y accesibles.
- Necesitamos cuidar su entorno.
¡Las fotos de Víctor son impresionantes! Desde que admiré a los pingüinos, he tenido el anhelo de avistar a los puffins y ahora, tras ver estas instantáneas, siento una mayor urgencia de organizar mi agenda para el viaje. No hay duda, esto es un argumento poderoso para adquirir un teleobjetivo.
¿Sigues en Inglaterra? Tienes la oportunidad perfecta, ya que están muy cerca y con visitar en primavera o verano probablemente los verás. ¡Espero que tengas buena suerte! En la web de turismo hay información sobre los mejores lugares para avistarlos y la cantidad que habita en cada área.
Hoy realicé una excursión por las islas (Lunga, Staffa y Iona). La experiencia fue impresionante, con un día radiante donde Lunga estaba llena de frailecillos. Tenías razón, son curiosos y se dejan fotografiar con facilidad. Definitivamente, fue una experiencia inolvidable.
Este post es muy completo y las fotos, como siempre, son fantásticas. Desde hace tiempo sueño con viajar a Escocia y lo que más me atrae es su naturaleza. Sin duda, planeo dedicar un día entero solo a observar y capturar imágenes de los frailecillos.
¡Gracias! Estoy seguro de que disfrutarás avistando no solo a los puffins, sino a muchas otras aves. Estas se encuentran fácilmente al norte y son bastante accesibles, lo que añade un extra de placer a la experiencia. ¡Un saludo!
¡Hola! Acabo de llegar a tu blog con la idea de visitar Escocia para ver a los frailecillos… ¡Qué post tan impresionante y qué fotos maravillosas! Tenía planeado ir en octubre, pero por lo que he leído, parece que no es la mejor época, ¿cierto? Saludos, Nür.
¡Hola, muchas gracias! En octubre es complicado avistar frailecillos porque están presentes en primavera y verano y en invierno se desconoce su paradero. Sin embargo, en esa época es probable que encuentres otras aves y si no, siempre están los ciervos. ¡Buen viaje!
Yo los vi a finales de julio, así que en agosto, creo que hay buena probabilidad de observación por May. ¡Te van a fascinar!
¡Felicidades por este post y por las fotos! Ya tengo una reserva para el próximo mes de Abril y espero poder encontrarme con los “clowns of the sea” (no estoy seguro si es demasiado pronto). Leyendo tu artículo, me quedó una duda sobre la ubicación de tu primer avistamiento en Durness. ¿El acantilado está a la izquierda del final del camino que se ve en Google Maps, que sale desde la playa Balnakeil? (donde hay un campo de golf y una iglesia). Al final de este sendero, a la derecha, se aprecia lo que parecen unas construcciones y una pista de helicóptero, ¿será la base militar de la que hablas?) Ver en Google Maps.
¡Gracias! El primer lugar donde los vi fue al final de la playa, tomando un sendero que lleva hacia la parte este de la costa, hasta el primer saliente grande que tiene una pequeña playa y un islote. Ahí podrás encontrar a los puffins. ¡Saludos!
FAQ - Preguntas Frecuentes
¿Cuál es la mejor época del año para ver frailecillos en Escocia?
La mejor época es entre abril y agosto, cuando los frailecillos regresan para anidar.
¿Dónde puedo encontrar frailecillos en Escocia?
Los puedes ver en lugares como las Islas Shetland, la isla de May y St. Kilda.
¿Dónde ver Puffins específicamente?
Las islas de Craigleith, Bass Rock y Staffa son puntos ideales.
¿Es fácil observar frailecillos?
Sí, a menudo se acercan sin miedo a la gente, lo que facilita la observación.
¿Se realizan excursiones para ver frailecillos?
Sí, hay tours en barco desde North Berwick para ver frailecillos y otros animales marinos.
¿Cómo es el comportamiento de los frailecillos?
Son aves sociales y curiosas, lo que los hace bastante amigables con los visitantes.
¿Cuál es el tamaño de un frailecillo?
Son de tamaño pequeño, aproximadamente de 30 a 40 cm de altura.
¿Dónde ver frailecillos en el norte de Escocia?
Sumburgh Head en las Shetland es un buen lugar para ver frailecillos en el norte.
¿Qué otros animales se pueden ver junto a los frailecillos?
Puedes ver alcatraces, focas y otras aves marinas en sus hábitats.
¿Por qué son especiales los frailecillos?
Su aspecto único y su comportamiento amistoso los hacen adorables y divertidos de observar.