Arugamama, el concepto japonés para ayudarnos a aceptar las cosas como son

Arugamama, el concepto japonés para ayudarnos a aceptar las cosas como son

¿Alguna vez has sentido esa frustración de querer que la vida sea diferente a como es? Arugamama es una joya de la filosofía japonesa que nos invita a dejar de lado la resistencia y, en cambio, a aceptar las cosas tal como son. Este concepto nos enseña que la vida está en constante flujo y que, al armonizarnos con nuestra realidad, podemos liberarnos del resentimiento y de esa carga emocional que a veces nos atrapa. Es como un soplo de aire fresco en medio del caos.

En lugar de luchar contra lo que no podemos cambiar, arugamama nos anima a reconciliarnos con lo inevitable. Es un recordatorio de que, al aceptar la realidad, podemos encontrar una paz interna que se traduce en una vida más sencilla y serena. Así que, la próxima vez que la vida te sorprenda con un giro inesperado, ¡recuerda este concepto! Te puede ayudar a abrazar lo que ya es, en vez de desgastarte por lo que no puede ser.

La Realidad Imparable: Aceptando Lo Que Es

La vida, en su esencia, se despliega de forma incesante y raramente sigue nuestros planes o deseos. Nuestro control sobre los acontecimientos es, por naturaleza, limitado, ya que solo podemos manejar lo que está en nuestra capacidad.

Aceptar esta realidad puede resultar complicado. La dificultad para dejar atrás la necesidad de controlar, la renuencia a adaptarnos a los cambios y el rechazo a la realidad cuando esta se opone a nuestras expectativas, son factores que alimentan nuestra angustia y sufrimiento.

"La vida fluye continuamente y no siempre tiene en cuenta nuestros deseos o planes."

El Poder de "Arugamama"

La cultura japonesa nos ofrece un concepto sabio que puede guiarnos en estos momentos difíciles: arugamama. Este término encarna la idea de aceptar las cosas tal como son, sin intentar forzarlas a encajar en nuestra visión idealizada.

Un Camino Hacia la Serenidad

Al reconocer y aceptar que no siempre podemos moldear la realidad a nuestro antojo, comenzamos a liberarnos de la frustración y el sufrimiento innecesarios. Aceptar las circunstancias y permitir que la vida fluya puede ser el primer paso hacia una existencia más plena y en paz.

El Profundo Significado de Arugamama

El término arugamama (在るが儘) trasciende su simple definición, se convierte en un concepto fundamental en el ámbito del budismo zen, que aboga por una aceptación radical de la realidad. En esencia, se refiere a "las cosas como son", aunque su traducción más exacta sería “tal como es”.

Quien abraza este concepto se encuentra en armonía con la naturaleza y con el flujo de la vida. Por ejemplo, comprende que durante el invierno hace frío y que en verano, el calor es inevitable, sin caer en el lamento inútil por lo que no puede cambiar. También asimila los hechos inevitables de la existencia, como son la enfermedad y la muerte, eventos que a menudo escapan de nuestro control.

“Arugamama no es resignación, sino una clara distinción entre lo que podemos modificar y lo que no.”

Es crucial no confundir el arugamama con una actitud de resignación pasiva. No se trata de dejarse llevar por lo que el destino dicte, sino de entender y actuar en consecuencia. Por ejemplo:

  • En invierno, podemos refugiarnos junto a una estufa para combatir el frío.
  • No podemos cambiar las temperaturas exteriores, pero podemos mantenernos cálidos en nuestros hogares.
  • No siempre podemos evitar las enfermedades, pero ciertamente, adoptar un estilo de vida saludable nos puede ayudar a prevenirlas o siquiera a retrasar su aparición.

En este sentido, el arugamama nos invita a destinar nuestra energía y esfuerzos a aquello que sí podemos cambiar, mientras aceptamos lo que no podemos influir. Esta aceptación es crucial para evitar la frustración, la insatisfacción y la ira que suelen surgir ante eventos inevitables.

El Arugamama: Fundamento de la Terapia Morita

El psiquiatra y filósofo japonés Shoma Morita fue el creador de una terapia innovadora en el siglo pasado, centrada en el concepto de arugamama. Su misión era ofrecer apoyo a quienes padecían ansiedad social y depresión, introduciendo una nueva forma de ver y abordar sus dificultades.

  • Morita pensaba que no existen experiencias completamente positivas ni negativas en la vida.
  • Los estímulos externos generan emociones que podemos aprender a gestionar.
  • Su enfoque se basa en la aceptación y en lo que realmente podemos controlar: nuestras acciones.

Uno de los aspectos más resaltantes de su terapia es que no solo se ocupa de los trastornos psicológicos, sino que también fomenta la autorrealización. Morita creía que este proceso comenzaba con la aceptación total, lo que implica aceptar quiénes somos, a los demás y el mundo que nos rodea.

  • A diferencia de los métodos más comunes en la psicología occidental, que a menudo buscan profundizar en nuestras emociones y sus causas, la terapia Morita adopta un enfoque pragmático.
  • Nos enseña que tanto las emociones placenteras como las perturbadoras son transitorias.

El objetivo de este enfoque holístico es fomentar un mejor funcionamiento diario, en lugar de centrarse únicamente en los síntomas. Morita sostenía que si nos enfocamos en nuestras reacciones y acciones, podemos avanzar en la vida y experimentar una sanación gradual.

  • Según Morita, los síntomas desagradables son parte de la condición humana.
  • La Terapia Morita orienta a las personas hacia el mundo natural y enseña un enfoque restaurador que fortalece nuestra capacidad de sanar.

El maestro japonés guiaba a sus pacientes para que se alejaran de la preocupación crónica y el impulso de combatir los síntomas, ya que esta lucha solo obstaculiza la recuperación y genera más angustia. Su enseñanza consistía en aceptar que las emociones, aunque sean desagradables, son naturales y pueden coexistir con nosotros.

  • En lugar de intentar eliminar las emociones negativas, Morita enseñaba a las personas a vivir con ellas.
  • Consideraba que deshacerse de las emociones era una tarea imposible.

La Distinción Vital entre Arugamama y Aceptación

Aunque el término arugamama está relacionado con la aceptación, es crucial entender que no son equivalentes. Resulta interesante notar que en la terapia Morita se evita el uso de la palabra aceptación porque esta implica una elección consciente, sugiriendo que podemos decidir si aceptamos o no lo que sentimos, una noción que se aleja de los principios moritianos.

  • Arugamama va más allá de una simple aceptación intelectual.
  • aquí y ahora.
  • Se experimenta como un estado de fluidez, donde los eventos se perciben tal cual son, sin juicios.

Por este motivo, la terapia Morita aboga por una aceptación experiencial encarnada del yo. Este concepto hace hincapié en que aceptar es permitirnos ser verdaderamente nosotros mismos, sin dejarnos arrastrar por lo que sucede a nuestro alrededor, evitando un torrente de preocupaciones.

  • Esta aceptación auténtica no depende de la mente.
  • No se trata de convencerse de que se aceptan los sentimientos.
  • Intentar forzarlo resulta contraproducente, generando un efecto rebote que nos atrapa en un ciclo de obsesiones.

De hecho, se puede comparar este tipo de aceptación con el comportamiento natural de los niños, que expresan su tristeza con llanto y su felicidad con sonrisas, sin filtros ni añadidos, lo que transforma esas emociones en experiencias intensas pero momentáneas.

Así, practicar arugamama nos alinea con nuestra esencia verdadera y nos permite fluir con el movimiento natural de nuestros pensamientos y emociones, ayudándonos a centrarnos en lo que verdaderamente importa.

Por el contrario, si no adoptamos este enfoque, podemos quedar atrapados en un conflicto mental, reflexionando sobre lo que debimos ser o hacer. Este patrón de pensamiento desgasta nuestra energía mental y emocional, llevándonos a estados prolongados de ira, resentimiento, arrepentimiento y miedo, todos ellos altamente perjudiciales para nuestra salud mental y física.

Las 3 “A” del arugamama

La incapacidad para manejar nuestras emociones puede convertirse en un obstáculo que nos impide disfrutar plenamente de la vida. Estas sensaciones son íntimas y personales, lo que exige que desarrollemos una capacidad de tolerancia hacia ellas, incluso si nuestra inclinación es evitar su presencia. Sin esa tolerancia, nos volvemos extremadamente vulnerables a los altibajos emocionales, que pueden hacer que nuestros planes se desmoronen.

Cuando carecemos de esta tolerancia, nos obsesionamos excesivamente con nuestras emociones internas, lo que puede llevarnos a situaciones poco saludables. Esto nos aleja del entorno que nos rodea, desconectándonos de las necesidades de quienes nos acompañan y nos hace olvidar las tareas que tenemos pendientes.

Por ello, ante un obstáculo, es fundamental reflexionar: ¿Qué emociones estoy experimentando? ¿De dónde nacen? Tal vez nos sintamos desvalorizados o frustrados porque nuestras ideas no son escuchadas. En lugar de luchar contra esos sentimientos, conviene considerarlos como estados temporales que eventualmente se desvanecerán.

La vida no siempre se ajusta a nuestros deseos. Cuando no estamos a gusto, idealizamos un cambio inmediato, aunque en la realidad eso rara vez es factible. El concepto de arugamama nos invita a observar la realidad tal como es y aceptar nuestras circunstancias. Ingar una realidad que no nos gusta impide que busquemos alternativas válidas. Solo a través de la aceptación podremos comenzar a recuperarnos.

Es recomendable observar el entorno sin el filtro de nuestras expectativas. Solo con una actitud de observación neutral, evitando el juicio o el rechazo, podremos estar preparados para actuar de forma constructiva y transformar lo que esté en nuestras manos.

Por otro lado, arugamama no implica una resignación pasiva. De hecho, aceptar lo que es, especialmente en situaciones adversas, requiere una dosis considerable de fortaleza y motivación. Es necesario trabajar de manera consciente dentro de las limitaciones que enfrentamos y con los recursos que tenemos a nuestra disposición.

La acción es un pilar esencial en la terapia Morita. Enfrentar problemas y situaciones inoportunas nos impulsa a preguntarnos: “¿Qué puedo hacer ahora?” Con las circunstancias tal y como están, ¿cuáles son mis opciones actuales?

Adaptarse y vivir de la mejor manera con los recursos disponibles representa una manera eficaz de entender la premisa final de arugamama. Esta filosofía se puede aplicar a todos los aspectos de la vida, desde insatisfacciones laborales hasta conflictos interpersonales, problemas de salud o dificultades económicas.

Enfrentemos cualquier situación aceptando nuestras emociones subyacentes y cuestionándonos qué pasos podemos dar con la realidad que tenemos. Aunque no podamos cambiar un evento específico, sí podemos alterar nuestra respuesta ante él. A menudo, este cambio de actitud puede ser suficiente para transformar nuestra perspectiva.

Referencia: Sugg, H. et al. (2016) Morita therapy for depression and anxiety (Morita Trial): study protocol for a pilot randomised controlled trial. Trials, 17: 161.

Soy psicóloga por vocación y profesión, además de divulgadora científica a tiempo completo. En mis ratos libres, me dedico a agitar neuronas y fomentar el cambio. Si quieres saber más sobre mí, ¡sigue leyendo!

Al inscribirte en Rincón de la Psicología, aceptas nuestra Política de Privacidad. Pero no te preocupes, ¡comparto tu aversión al spam!

FAQ - Preguntas Frecuentes

¿Qué es arugamama?

Arugamama es un concepto japonés que significa 'aceptar las cosas como son'.

¿Cómo se relaciona arugamama con la naturaleza?

Arugamama implica armonizarse con la naturaleza y entender la fluidez de la vida.

¿Qué beneficios trae aceptar las cosas como son?

Aceptar la realidad ayuda a liberar energías negativas y reduce el sufrimiento emocional.

¿Arugamama promueve la resignación?

No, arugamama se aleja de la resignación y el resentimiento, enfocándose en la aceptación activa.

¿Cómo aplicar arugamama en la vida diaria?

Incorporar arugamama es observar la realidad sin juicio y adaptar nuestras expectativas.

¿Es arugamama un término nuevo?

No, es un concepto tradicional japonés, relacionado con la filosofía zen y la terapia de Morita.

¿Hay técnicas para practicar arugamama?

Sí, la meditación y la reflexión son herramientas útiles para cultivar la aceptación.

¿Qué rol juega la perspectiva en arugamama?

Arugamama ayuda a ampliar la perspectiva, permitiendo ver más allá de las limitaciones personales.

¿Arugamama se relaciona con la felicidad?

Sí, al aceptar la realidad, se puede encontrar paz y, por tanto, una forma de felicidad.

¿Cuáles son ejemplos de arugamama en la vida cotidiana?

Aceptar pérdidas, adaptarse a cambios o adaptarse a las imperfecciones son ejemplos de arugamama.

Artículos relacionados