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Descubre información sobre las vías pecuarias en Andalucía en nuestro blog de Información Ambiental

Durante el año anterior, el 95% de los tramos delimitados hasta el momento fueron incorporados a la Red de Información de Vías Pecuarias de Andalucía (REDIAM). El 5% restante está siendo progresivamente integrado, a medida que se realizan nuevos expedientes de delimitación y se adapta detalladamente el Inventario a dichos tramos. Todo este esfuerzo tiene como objetivo principal respaldar la planificación territorial, ambiental y rural, como eje crucial en la gestión del territorio andaluz. Cabe destacar que la información proporcionada refleja el estado administrativo de las vías pecuarias, por lo que aquellas que aún no cuentan con tramos delimitados son solo una aproximación. Para obtener más detalles sobre su trazado, se recomienda acudir a la Delegación Territorial correspondiente. Algunos ejemplos de estas vías son el Cordel del Camino de los Andevaleños en Encinasola, cuya autoría pertenece a la Agencia Medio Ambiente y Agua de Andalucía, y la Vereda del Jarrillo en Paymogo, también con autoría de esta agencia.

LA VERDADERA DIMENSIÓN DE LOS CAMINOS GANADEROS

¿Se les otorgó a las Vías Pecuarias el ancho de deslinde que administrativamente les correspondía en 1968?

Lamentablemente, la respuesta es ¡NO! En la mayoría de los casos de Vías Pecuarias clasificadas, esto fue una realidad evidente.

La primera consecuencia de esta situación fue la "protección" de estos caminos públicos, ya que se les clasificó como tales. Gracias a la Clasificación de 1968, hoy en día podemos disfrutar de un patrimonio público (a pesar de las frecuentes invasiones de particulares), que de otra manera hubiera quedado siempre en manos de terratenientes y propietarios de fincas rústicas.

Sin embargo, con esta Clasificación, de manera sistemática y por Ley, se estableció una medida estándar de anchura para todas las Vías Pecuarias en España. Por ejemplo, una Cañada Real tendría una anchura de 75,22 metros (independientemente de si está en la Meseta Central o en las Cordilleras Béticas). Ahí es donde surge la segunda consecuencia, tan negativa como catastrófica, ya que tiene un impacto directo en la situación que hoy sufren cientos o miles de agricultores y dueños de fincas rústicas.

Identificar vías reservadas para animales de granja

La carretera para el paso de ganado: cumpliendo con los criterios establecidos por la ley.

Para determinar si una vía es exclusivamente destinada para el traslado de ganado, es imprescindible comprobar si cumple con los criterios establecidos por la ley de vías pecuarias. En primer lugar, es necesario que exista una tradición histórica de paso de ganado por la ruta en cuestión, que cuente con la demarcación y señalización correspondiente como vía pecuaria, y que sea gestionada por la comunidad autónoma correspondiente. Si estas condiciones se cumplen, entonces se considera que la vía es de uso exclusivo para el ganado y goza de la protección del régimen especial que rige las vías pecuarias.

El Reordenamiento de y la Falta de Lógica

Cañadas Reales: un legado del pasado que sigue causando problemas en la actualidad

En 1968, se descubrió la existencia de Cañadas Reales y otras Vías Pecuarias de gran anchura en todo el territorio español. Sin embargo, en aquel momento no se previeron las consecuencias que esto traería en el futuro.

Y ahora ese futuro es nuestro presente. Los propietarios legítimos de fincas rústicas se enfrentan al acoso constante de la Administración Pública, que, de manera cuestionable, se apropia de tierras que nunca fueron consideradas como de Dominio Público.

Algunos propietarios han decidido llevar a la Administración a los tribunales, obteniendo en algunos casos la victoria (sobre todo aquellos que tenían sus fincas inscritas en el Registro de la Propiedad). Gracias a eso, se han podido mantener en su posesión las franjas de terreno que la Administración intentaba convertir en demaniales.

Dimensiones en metros de una ruta ganadera

Estas sendas, junto con las cañadas y los cordeles, pertenecen al conjunto de vías pecuarias en España. Su ancho no supera los 20 metros y su principal función es permitir el paso de ganado a pie. A pesar de ser más angostas que las otras vías pecuarias, las sendas pecuarias desempeñan un papel clave en la conectividad del territorio y el aprovechamiento de los recursos naturales. Además, su importancia como destino turístico y de ocio está en aumento, motivando iniciativas para su restauración y valoración.

Cuáles son los usuarios autorizados en una vía pecuaria

Las vías pecuarias son una parte esencial del patrimonio público español, utilizadas desde antaño para la movilidad controlada de personas y animales. Ganaderos tienen el derecho de transitar con su ganado y otros usuarios como senderistas y ciclistas pueden utilizarlas siempre y cuando no perturben la actividad ganadera. La protección y conservación de estos caminos es indispensable para salvaguardar la actividad ganadera y la riqueza de nuestro patrimonio natural.

Las vías pecuarias son un tesoro público, abiertas para el tránsito de personas y animales controlados en todo el territorio, siendo fundamental para los ganaderos y para aquellas personas que mantengan el proceso de patrimonio vivo. Respetar y cuidar estos caminos es un deber para garantizar el desarrollo sostenible de la actividad ganadera y para la preservación de nuestra riqueza natural.

Andalucía cuenta con un legado histórico y cultural innegable en las vías pecuarias. Estas antiguas rutas han sido testigo del traslado del ganado y de la conexión entre diferentes poblaciones durante siglos. En la actualidad, estas vías deben ser cuidadas y protegidas como parte de nuestro patrimonio. Un exhaustivo mapeo de las vías pecuarias en Andalucía permitiría conocer su ubicación exacta y su relación con el entorno natural y cultural, además de facilitar su uso y disfrute por parte de la población. ..

Fundamentos esenciales y breve registro de sucesos

Vías Pecuarias en España

Las Vías Pecuarias son antiguos caminos empleados para el tránsito de ganado en sus desplazamientos. Su origen se remonta al siglo XIII, cuando el Rey Alfonso X el Sabio concedió al Honrado Concejo de la Mesta el derecho de paso para el ganado en Castilla y León. Es así como comienzan a formarse las Vías Pecuarias en España, un valioso patrimonio histórico que aún perdura en la actualidad.

En 1968, mediante una Orden ministerial, se aprobó la clasificación de las Vías Pecuarias en los distintos municipios de España. Según su anchura, estas vías se dividen en cuatro categorías: Cañadas Reales (75,22m), Cordeles (37,61m), Veredas (20,89m) y Coladas (con menor anchura que las Veredas).

A día de hoy, las Vías Pecuarias están protegidas por la Ley 3/95, de 23 de marzo. Esta ley establece que estas vías tienen un carácter demanial, es decir, pertenecen al Dominio Público, y atribuye su titularidad a las Comunidades Autónomas. Además, la ley establece los fines de la actuación de las Comunidades Autónomas en lo que respecta a la protección y conservación de las Vías Pecuarias.

Información

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Esta ayuda ha sido otorgada por el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI) y cuenta con la cofinanciación de la Unión Europea a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER). De esta manera, TCA CARTOGRAFÍA Y GEOMÁTICA, S.A. podrá llevar a cabo su proyecto de investigación y desarrollo con mayor viabilidad y recursos.

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