que es la teoria del capital humano

Descubre qué es y cómo aplicar la teoría del capital humano

La expresión "capital humano" se emplea en la teoría del desarrollo económico para referirse a un elemento esencial en la producción, determinado por el nivel educativo y la efectividad de los individuos participantes en un proceso productivo.

El Impacto de CH como Factor de Producción

La inclusión de habilidades y aptitudes humanas en el proceso productivo fue originalmente propuesta por Uzawa (1965) y Lucas (1988). Según sus teorías, la función de producción de una economía puede ser expresada como una función de Cobb-Douglas:[2]​

Estos dos investigadores utilizaron dicha función para representar una economía con crecimiento endógeno en dos sectores, en la que la evolución del capital físico y del capital humano varían de acuerdo a las siguientes ecuaciones:

Este modelo establece que, conforme a la segunda de las ecuaciones (2), el crecimiento del capital humano es mayor en aquellas economías con un mayor nivel de capital físico. Esto se debe a que Lucas y Uzawa asumieron que la formación de capital humano (que incluye conocimientos y habilidades más especializadas) es más efectiva en entornos con un elevado nivel de capital físico, lo que permite su desarrollo. Siempre y cuando el primer término supere la "depreciación" o envejecimiento del capital humano (representado por el segundo término), este seguirá incrementándose.

Teoría del capital humano

< ,p> El enfoque de la teoría está estrechamente relacionado con el concepto de crecimiento económico. Si definimos este como el incremento en la producción de bienes y servicios, entonces el capital humano es un factor fundamental en dicho proceso. < ,/p>

Contribuyendo al éxito de las empresas y la economía de un país, el capital humano se refiere a las habilidades, aptitudes, experiencias y conocimientos que posee cada empleado. Es, por tanto, una pieza clave en el logro del crecimiento económico. < ,/p>

Medida del capital humanoeditar

El Foro Económico Mundial, también conocido como el Foro de Davos, ha estado publicando anualmente desde 2012 su Informe sobre el capital humano mundial, conocido como The Global Human Capital Report 20nn (siendo nn las dos últimas cifras del año al que se refiere).

Este informe contiene el Índice mundial de capital humano, designado por las siglas GHCI (Global Human Capital Index). Valorando de 0 a 100 a más de un centenar de países (la mayoría de los que existen en el mundo, pero no todos), el GHCI mide la calidad de sus recursos humanos.

En octubre de 2018, el Banco Mundial hizo público su Índice de capital humano (HCI por las siglas de Human Capital Index), con el objetivo de evaluar el potencial de desarrollo de la población en los países del mundo. Este índice clasifica a los países según su inversión en educación y salud para la infancia y los jóvenes, de mayor a menor.

La diferencia entre la cifra calculada para cada país y el número 1 indica el potencial de crecimiento en términos de Producto Interno Bruto (PIB) si su educación y salud fueran óptimas. Por ejemplo, Austria, con un HCI de 0,79, podría aumentar su PIB si mejorara la educación y salud de su población.

En septiembre de 2018, la revista médica The Lancet introdujo una nueva medida: el capital humano esperado (expected human capital). Se calcula tomando en cuenta la esperanza de vida entre los 20 y los 64 años, el nivel educativo alcanzado, la calidad del aprendizaje y la salud. Este cálculo abarca 195 países desde 1990 hasta 2016.

Según este índice, Finlandia tiene el mayor nivel de capital humano esperado, con 28,4 años ajustados por salud, educación y aprendizaje entre las edades de 20 y 64 años. Por otro lado, Níger tiene el menor, con menos de 1,6 años de esperanza de vida ajustados por estos factores.

El adecuado manejo del talento humano

La inversión en capital humano es un aspecto esencial para las empresas, ya que implica destinar recursos a mejorar la formación, habilidades, destrezas y aptitudes de sus trabajadores. Al incrementar las competencias de su personal, las empresas pueden lograr un rendimiento y eficiencia óptimos.

Por esta razón, muchas empresas ven como una oportunidad el invertir en la formación de sus trabajadores. Al desarrollar y mejorar las habilidades profesionales de sus empleados, pueden mejorar su desempeño y resultados en el ámbito laboral.

Como resultado, al invertir en capital humano, las empresas aumentan las posibilidades de alcanzar sus objetivos y mantener su competitividad en el mercado. Además, esto también puede contribuir a la retención del talento dentro de la empresa, al desarrollar un ambiente de trabajo en el que los empleados se sientan valorados y motivados.

Por ello, es importante que las empresas dediquen recursos y esfuerzos a esta área para asegurar su futuro éxito.

La medida del valor humano

El Proyecto Capital Humano del Banco Mundial fue lanzado en 2018 con el objetivo de mejorar la inversión en la formación de personas, buscando así una mayor equidad y crecimiento económico.

Este proyecto evalúa de qué manera los países invierten en la formación, habilidades y competencias de la juventud actual. En el listado de los diez primeros países, el primer lugar lo ocupa Singapur, seguido de Corea del Sur y Japón, y en la décima posición se encuentra Canadá. España, por su parte, se ubica en el lugar 32.

Además, en esta perspectiva del capital humano se incluye la salud de las personas como un factor significativo, con el fin de superar el concepto original del mismo.

Depreciación del Capital Humanoeditar

En 1982, los expertos en economía Jacob Mincer y Haim Ofek llevaron a cabo una investigación que reveló que el capital humano, al igual que el capital físico (maquinaria), sufre una tasa de depreciación individual debido al desgaste y la obsolescencia causados por el progreso tecnológico. Esta conclusión fue respaldada en 1995 por Shoshana Neuman y Avi Weiss, quienes utilizaron una versión modificada de la ecuación minceriana para incluir la influencia de la interacción entre la educación y la experiencia. Esta variable permite tener en cuenta el efecto del tiempo en cada nivel de educación, lo que se puede interpretar como una depreciación de la educación recibida.

Al considerar los descubrimientos de Mincer y Ofek, así como la confirmación de Neuman y Weiss, se puede observar que tanto el capital humano como el físico sufren un desgaste con el paso del tiempo y la evolución tecnológica. Aunque tradicionalmente se consideraba que solo el capital físico se depreciaba, ahora sabemos que también ocurre con el capital humano, lo cual tiene un impacto en la economía y el desarrollo de las personas.

Este fenómeno de depreciación del capital humano debido a la obsolescencia y el paso del tiempo plantea nuevos retos para las sociedades modernas. Es necesario encontrar formas de actualizar y mejorar constantemente la formación y la educación de las personas para evitar que se vuelvan obsoletas en un mundo en constante evolución. De lo contrario, corren el riesgo de quedarse atrás en un mercado laboral cada vez más competitivo.

Esto tiene importantes implicaciones para la economía y el desarrollo de las personas, ya que se debe mantener una constante actualización y mejora de la educación para evitar la obsolescencia en un mundo en constante cambio.

El uso coloquial de CH

Actualmente, se evidencian diversos usos informales de la expresión "capital humano", distintos a los conceptos más o menos técnicos acuñados por los economistas. En estos usos informales, la expresión hace referencia a un grupo de individuos calificados y no a un valor medible asociado a dicho grupo.

Desarrollo del capital humano

El desarrollo del capital humano y su gestión van de la mano. La premisa fundamental es invertir en las habilidades y competencias de los empleados.

Sin embargo, el concepto de desarrollo del capital humano tiene un enfoque más personal. No solo se trata de mejorar las habilidades y competencias de los empleados, sino también de fomentar actitudes psicológicas y motivacionales que contribuyan a un mayor bienestar.

Este enfoque busca no solo el crecimiento profesional de los empleados, sino también su crecimiento individual y su bienestar general. Por lo tanto, el desarrollo del capital humano es un proceso integral que abarca aspectos técnicos y emocionales.

La inversión en el desarrollo del capital humano beneficia tanto a los empleados como a la empresa. Los empleados adquieren nuevas habilidades y conocimientos que les permiten desempeñarse mejor en sus roles, mientras que la empresa obtiene un equipo más motivado y comprometido.

La gestión adecuada del capital humano se basa en reconocer y valorar el potencial de cada empleado, brindándoles las oportunidades y herramientas necesarias para su crecimiento y desarrollo. De esta manera, se fomenta un ambiente laboral positivo y se fortalecen las relaciones entre los empleados y la empresa.

Al invertir en el crecimiento y bienestar de sus empleados, se logra un ambiente de trabajo productivo y satisfactorio para todos.

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