cuando fue la teoria de la circulacion dela sangre

Origen de la Teoría de la Circulación de la Sangre Harvey y Servet

Nacido el 1 de abril de 1578 y fallecido el 3 de junio de 1657, William Harvey fue un médico inglés reconocido por realizar la primera descripción precisa de la circulación sanguínea y las propiedades de esta al ser bombeada por el corazón a través de todo el cuerpo. Este hallazgo validó las teorías previamente propuestas por René Descartes en su obra "Descripción del cuerpo humano", donde se señalaba que las arterias y venas funcionaban como conductos para el transporte de nutrientes por el cuerpo.

La corriente sanguínea previa al descubrimiento de Harvey

En el siglo IV a. C., el célebre filósofo griego, Aristóteles, destacó al corazón como el órgano más relevante del cuerpo humano. Tras sus investigaciones, concluyó que era el primero en desarrollarse en los embriones de aves.

A su vez, Aristóteles consideró al corazón como la principal fuente de calor en el cuerpo, idea que posteriormente fue reforzada por el renombrado médico Galeno. Este último, en sus estudios, profundizó en su estructura y desarrolló teorías sobre sus funciones.

Según Galeno, la complejidad de las fibras que componen el corazón fue diseñada por la Naturaleza para poder desempeñar una amplia gama de funciones, como su capacidad de dilatar para atraer lo que resulta beneficioso para el organismo, de contraerse para disfrutar de lo que ha sido atraído, o de contraerse aún más para expulsar los residuos del cuerpo.

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Nuevo modelo circulatorioeditar

El descubrimiento de la circulación de la sangre por parte de Harvey probablemente se vio influenciado por las obras de René Descartes y Miguel Servet, además de la medicina musulmana antigua, en particular el trabajo de Ibn Nafis en el siglo XIII. Sin embargo, la mayor influencia en el desarrollo de sus avances fueron los autores y profesores de la Escuela de Padua, como Hyeronimus Mercurialis, Mateo Realdo Colombo, Gabriel Falopio, y Andreas Vesalio, quien fue el creador de la anatomía moderna, entre otros.

Aparte de su experiencia en Padua, también influyó en Harvey para el desarrollo posterior de sus ideas su trabajo en el Colegio de Médicos de Londres. Allí se le encargó dirigir las Lumleian Lectures a partir de 1616 hasta 1656, impartiendo dos lecciones semanales durante el año y una disección pública anual. En 1616, preparó sus clases con sus Praelectiones Anatomicae (Lecciones previas de anatomía).

Es en 1616 cuando Harvey comenzó a desarrollar sus estudios sobre la circulación de la sangre. Sus hallazgos fueron publicados en 1628 en su libro Exercitatio Anatomica de Motu Cordis et Sanguinis in Animalibus (Un estudio anatómico sobre los movimientos del corazón y la sangre de los animales), escrito en latín. En su obra, utilizando el método científico, argumentó su hipótesis de que la sangre era bombeada por el corazón en el sistema circulatorio del cuerpo humano, basándose en sus observaciones anatómicas y experimentación con vivisección.

Análisis y percepción de su laboreditar

En su obra Opuscula anatomica (1649), el reconocido anatomista francés Jean Riolan puso en duda las ideas de Harvey, lo que llevó a este último a defenderse en su tratado Exercitationes anatomicae prima et altera de circulatione sanguinis ad Joannem Riolanum filium (Ejercitaciones anatómicas primera y segunda sobre la circulación de la sangre para Jean Riolan hijo, 1649). En él, Harvey argumentó que la postura de Riolan era contraria a la evidencia observada.

En términos más amplios, el descubrimiento de Harvey acerca de la circulación de la sangre se basó en una inferencia, no en una observación directa, y era incompatible con el paradigma científico vigente en aquel momento.[7] Este paradigma afirmaba, entre otras cosas, que la sangre podía fluir de un lado del corazón al otro. Harvey sabía que enfrentaba una ardua batalla:

"Sin embargo, lo que queda por decir acerca de la cantidad y el origen de la sangre que circula de esta manera, es tan novedoso y revolucionario que no solo temo la envidia de unos pocos, sino que también me aterroriza que la humanidad en general me considere como su enemigo".

El descubrimiento de Harvey

La transfusión de sangre como terapia no resurgiría hasta el siglo XX, cuando se lograron grandes avances en el entendimiento de la sangre y sus características. Pasarían largos períodos de tiempo antes de que volviera a ser utilizada. A continuación, se presenta un artículo de 1922 titulado "El coraje de un doctor".

La sencilla idea de llevar a cabo una transfusión de sangre era inimaginable hasta que el doctor William Harvey, en la década de 1600 en Londres, descubrió la circulación de la sangre.

La Razón Fundamental El Flujo Continuo

El descubrimiento de William Harvey: al reflexionar detenidamente sobre la gran cantidad de sangre que pasa por nuestro cuerpo en un corto periodo de tiempo, él percibió algo sorprendente. O bien nuestras venas estaban completamente vacías y nuestras arterias a punto de estallar debido a una invasión excesiva de sangre, o bien la sangre estaba regresando de las venas a las arterias y volviendo al ventrículo derecho del corazón.

Antes de este descubrimiento, era impensable inyectar sangre en el cuerpo ya que se creía que solo se podía extraer.

Harvey lo describe así: "Primero se contrae la aurícula, que con su contracción arroja al ventrículo la sangre que contiene. Con esto queda repleto el corazón que entonces se levanta, tensiona todas sus fibras, contrae sus ventrículos y ejecuta su latido, por medio de la pulsación continuamente lanza por las arterias esa sangre que recibió de la aurícula". Es decir, el corazón se encarga de impulsar la sangre a través de las arterias, gracias a sus contracciones, distribuyéndola por todo el cuerpo. Un proceso que antes resultaba desconocido.

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Infancia y educacióneditar

Harvey nació en Folkestone, Kent, Inglaterra, el 1 de abril de 1578. Era hijo de Thomas Harvey, un próspero comerciante. En primer lugar, asistió a The King's School de Canterbury, una prestigiosa grammar school. Más tarde, a la edad de quince años, ingresó en el Gonville and Caius College de Cambridge. Esta institución gozaba de un ambiente italianizante gracias a la formación en Padua de su director, John Caius. Él había incorporado las directrices de la educación paduana al college.

En 1597, obtuvo su título de Bachelor of Arts y viajó a Italia. Allí, un año más tarde, se matriculó en la Universidad de Padua, donde continuó sus estudios...

Su formación en Padua tuvo una gran influencia en Harvey, ya que esta universidad era conocida por su énfasis en las ciencias y la medicina. Durante su tiempo allí, adquirió una sólida base en anatomía y fisiología, que serían fundamentales en sus avances médicos futuros.

En 1602, luego de cinco años de estudios en Padua, Harvey obtuvo su grado de Doctor of Medicine y regresó a Inglaterra para comenzar su carrera médica. Fue nombrado miembro del Royal College of Physicians y comenzó a dar clases en la Universidad de Londres.

Sin embargo, fue su descubrimiento sobre el funcionamiento del sistema circulatorio en 1628 lo que lo llevó a la fama. Harvey demostró que la sangre circula constantemente por el cuerpo, impulsada por el corazón, en lugar de ser producida y consumida en los órganos como se creía anteriormente.

Este hallazgo revolucionario cambió para siempre la comprensión de la medicina y la anatomía humana, y sigue siendo una de las contribuciones más importantes de la historia médica. Harvey dedicó el resto de su vida a la investigación y la enseñanza, y su legado sigue siendo una piedra angular en la medicina moderna.

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